Caso Muñoz: se perdió vital muestra para la investigación

 En la investigación para el esclarecimiento del homicidio del policía Lucas Muñoz hay hechos que sorprenden y desconciertan. Un pelo de algo más de 30 centímetros de extensión que los investigadores hallaron en una prenda de Muñoz y que enviaron a analizar a un centro especializado para tratar de obtener un perfil genético dio tantas vueltas que la muestra terminó destruida. Y lo más insólito es que el resultado que arrojó uno de los análisis que se hicieron sobre ese pelo concluyó que pertenecía al policía asesinado.

“Lo sorprendente es que nos digan que ese cabello es de Lucas. Para mí es imposible”, sostuvo la abogada Karina Chueri, que representa a los padres de Muñoz, que son querellantes en la causa.

Dijo que el pelo lo hallaron peritos de Gendarmería que analizaron la ropa, que Muñoz tenía puesta cuando lo hallaron muerto el 10 de agosto del año pasado, tirado en un descampado en las afueras de la Bariloche. Esas prendas fueron analizadas el año pasado, en el laboratorio que Gendarmería tiene en el edificio Centinela de la Ciudad de Buenos Aires.

El fiscal Martín Govetto explicó la situación. Dijo que desde el principio querían examinar ese cabello.

Comparación

Dijo que se trató de examinar en el laboratorio regional de genética forense de Bariloche, pero la directora Silvia Vanelli Rey “nos informó que ella no podía obtener ADN porque no tenía suficiente material de ese cabello de treinta centímetros”.

“Obviamente descartamos que sea de Lucas, que no tenía cabello de treinta centímetros”, rememoró el fiscal a cargo de la investigación del homicidio.

“Entonces, se empezó a buscar una comparación por medio de Invap de ese cabello que podía ser de (Daniela) Rodio (que entonces era la novia de Muñoz) que sí tenía el cabello de treinta centímetros y había estado la noche anterior y la mañana del 14 de julio (de 2016) con Lucas”, comentó Govetto.

“Pensamos que tal vez podía haber quedado un cabello en la ropa de Lucas. Se intentó hacer eso, pero no se pudo hacer porque Rodio ese día que tenía que extraerse la muestra, se hizo un tratamiento específico en el cabello que no permitía compararlos”, apuntó el fiscal.

Dijo que a partir de esa situación resolvieron pedir un estudio de ADN mitocondrial, “que solamente se hace en Buenos Aires”. Se trata de un análisis distinto al convencional, “porque el ADN mitocondrial rompe la muestra”, añadió.

Estudio

Govetto informó que se autorizó ese estudio específico, se mandó la muestra a un laboratorio de Buenos Aires, pero no hizo el estudio de ADN mitocondrial, “sino que directamente nos dice que hicieron otro estudio y nos dio que es un perfil de un hombre”.

Recordó que a partir de esa información del laboratorio concluyeron que el cabello no era de Rodio. “Entonces, fuimos a comparar con otras dos personas con cabello largo que habían tenido contacto con Lucas el día anterior a su desaparición”, puntualizó Govetto.

Se extrajeron las muestras de esos dos hombres y se enviaron a analizar, pero resulta que otro informe concluye que el pelo enviado era de Muñoz. “Se confirmó que el ADN de ese cabello era de Lucas”, informó Govetto.

“Lo que nosotros suponemos es que hubo una contaminación de ese cabello con una muestra de sangre, por ejemplo, que haya quedado en ese cabello”, explicó. Pero se quedaron sin la muestra, porque “ahora ese cabello está destruido y no se puede hacer ningún otro estudio”.

“Cuando nos informaron que el pelo era de Lucas nos pareció raro”, sostuvo Chueri. Por eso, preguntaron en el juzgado de Instrucción 2, a cargo del juez Bernardo Campana, por la muestra que habían llevado a analizar.

De todos modos, indicó que hay otros cabellos que los peritos hallaron en una polera negra que la víctima tenía debajo de la camisa.

Chueri está convencida de que Muñoz no pudo haber estado nunca los 25 días que estuvo secuestrado con la misma ropa. La abogada por la querella abona la hipótesis de que Muñoz fue víctima de un secuestro extorsivo, en la misma sintonía que la fiscalía. Aunque aún no sabe por qué ni para qué lo pudieron haber secuestrado.

“Lo que suponemos es que hubo una contaminación de ese cabello con una muestra de sangre, por ejemplo, que haya quedado en ese cabello”,
comentó el fiscal Martín Govetto.
El auto, ¿era un Corsa?
Cuando desapareció Muñoz se informó que dos agentes lo habían visto charlando con el conductor de un Chevrolet Corsa, gris, en la avenida Juan Herman, a pocas cuadras de la Comisaría 42ª del barrio 2 de Abril, adonde se dirigía a trabajar.
Pero los investigadores hasta ahora nunca hallaron ese auto. “Tenemos confirmado, por testigos que creemos que dijeron la verdad, que Lucas estaba conversando con el conductor de un vehículo”, recordó el fiscal Govetto.
“Lo dicen dos policías que son los últimos que lo vieron. No hay nada que nos indiquen que hayan mentido. Creemos que eso fue así”, afirmó Govetto.
“Es un Corsa gris. No tenemos ninguna otra identificación que no sea un Corsa gris. Es un vehículo muy común”, señaló.
“Estuvimos pensamos que podía ser otro vehículo, hicimos un análisis de eso, tenemos una investigación sobre eso, una diligencia pendiente”, comentó. Indicó que piensan que pudo haber sido un Corsa, “pero no descartamos que sea vehículo de similares características”.
Las peritaciones pendientes
El fiscal Govetto explicó que aún quedan peritaciones por hacer en la investigación para tratar de esclarecer el homicidio del Muñoz. “Estamos tratando de analizar teléfonos, pensábamos que se habían hecho, pero todavía no se hizo y ahora volvemos a reiterar el tema de los cabellos”, sostuvo.