Espacios culturales convocan a concentración

 Si bien hay una especie de mesa de trabajo con la Secretaría de Cultura, otras áreas municipales insisten en infraccionar a los sitios que meses atrás, pidieron readecuar ordenanzas. La última inspección fue en La Casita Azul.

Después de una nueva inspección que finalizó con actas de infracción por parte de la Municipalidad de Bariloche para La Casita Azul, se reavivó a la polémica que tiene como interlocutores a los espacios culturales que se agrupan en FAINA y a la Secretaría de Cultura de la Municipalidad. Mientras los primeros convocaron a una concentración para hoy a las 10 en el Centro Cívico, el área municipal dio a conocer que trabaja con el resto de las dependencias y que la seguridad del público está en el centro de sus preocupaciones.
Bajo la sigla FAINA se expresan “El nuevo galpón”, la “Feria del Libro Independiente y Autogestiva”, “Quinquela Bar Tertulia” y “La nueva orden del tornillo”, entre otros espacios. Dieron a conocer que el viernes último, en conjunto con “artistas representantes de la movida del rock en Bariloche”, tuvo lugar una reunión con integrantes del Concejo Municipal y con Maximiliano Altieri, director de Gestión y Promoción Cultural.

Para hoy anunciaron que “como todos los martes volvemos a reunirnos para poder conversar y seguir trabajando los puntos de la ordenanza de espacios culturales, que es para lo que creemos estamos caminando juntos. Sin embargo, en esta reunión optamos por decir las cosas que seguían sin decirse para aclarar ciertos puntos, ya que en las últimas semanas se dijeron muchas palabras como verdades y muchas verdades sin saber”.

Según el comunicado que hicieron público, “El Nuevo Galpón fue visado previamente por Inspección y visto como ‘en regla’ para los eventos y que no habría problema si se realizaba a puertas abiertas como se dijo, sólo si se pagaba el canon de 3.250 pesos en Inspección, lo cual no se concretó por cuestiones económicas”. El ámbito en cuestión fue objeto de una inspección el fin de semana anterior, durante la cual se labraron varias infracciones.

Los impulsores de los espacios expresaron que “conocemos por palabra de Maxi (Altieri) que desde Cultura es posible eximir ese canon, ahora que sabemos podemos hacer uso. Desde Secretaría de Cultura se propone para charlar más puntualmente las posturas y los modos de trabajar una reunión para el día próximo, dejando cerrada la misma del día martes en que el siguiente volveríamos sobre los puntos de la ordenanza para seguir avanzando porque es realmente urgente para nuestros espacios estar dentro de esta ley que nos avale a trabajar, no como comercios, sino como espacios facilitadores de la cultura”.

Acta tras acta

En palabras que parecen más dirigidas hacia el resto de los espacios que a los medios de prensa, el texto exhortó: “hagamos valer la cultura más que el comercio y como dijo un público: quiero que se cuiden MIS salidas de emergencia, que son estos espacios, que a mí me cuidan, que de seguir con las vigentes ordenanzas, si así se dispone, se sigue acta tras acta de notificación”.

Por otro lado, el miércoles pasado hubo otra reunión “con todos los integrantes de Cultura de Municipalidad, Casa Tao, La Nueva Orden del Tornillo, Casita Azul, Teatro Paico, FLIA, Nuevo Galpón, Galpón de Marchese, representantes de la movida del rock, Deparados Stand Up y más artistas. Desde la Secretaría se dice en palabra que se acompaña la cultura, que se están haciendo muchas cosas. Y sí, nosotros estamos ahí, porque somos los mismos artistas los que nos ponemos la camiseta para apurar y acompañar la movida del Teatro Municipal, son los artistas los que acompañan los ciclos de Sala de Prensa, la Biblioteca, La Llave y son espacios para ellos y eso se valora, respeta y defiende”.

No obstante, según el FAINA “esto no quita que Bariloche sigue necesitando multiplicar muchos más espacios. Me encanta la Llave, pero no voy a hacer un recital punk ahí. La van a hacer mierda, dice Diego, músico. También es tiempo quizás de aclarar esta dicotomía entre Estado y autogestión, ¿Se entiende que lo que se hace para organizar eventos culturales municipales, no es lo que inquieta?”

Los partidarios de la autogestión señalan que “el detalle nace cuando, para nosotros, poder trabajar desde la autogestión, no se nos es permitido desde el Estado porque se infracciona, se clausura, se traba. Es ahí donde sale nuestro grito: la cultura no se clausura… No queremos trabajar en la ilegalidad, por eso pedimos el acompañamiento del Estado en esta causa y reunirnos semana a semana para llegar a la ordenanza. Se propone una reunión específica con los espacios que tienen vacíos legales junto a Cultura, Fiscalización e Inspección que por cuestiones volcánicas se pospone hasta nuevo aviso”, lamentaron.

Entre otras consideraciones, expresó el FAINA que espera se resuelva “esta zona gris en el transcurrir de la creación de la ordenanza que nos ampare para no trabajar en la ilegalidad. Eso creímos, seguimos incluso creyendo que defendemos lo mismo… Sin embargo ayer (por el sábado) nuevamente recibimos otra acta de notificación por ‘no avisar’ y no estar habilitados como comercio, en una casa de teatro, además de patrimonio histórico, que realiza hace añares obras y eventos”.

En consecuencia, se precisó la convocatoria para hoy desde las 10 a las 22. “Nos vemos todos, si la ceniza se hace ausente, en la plaza del Centro Cívico: público, artistas de toda índole, hablantes, defendientes (sic), etcétera, quienes creemos y defendemos el arte desde nuestras ganas, elegimos trabajar de ello, vivir en ello, cuidarlo y multiplicarlo”. El texto en cuestión se hizo público desde la casilla de Benito Quinquela Martín.

Trabajo en regularización

Por su parte, la Secretaría de Cultura de la Municipalidad expresó “su preocupación ante los acontecimientos de los últimos días donde varios espacios culturales han recibido distinto tipo de notificaciones del área de Inspección General”. El área que tiene a su frente a Rubén Fernández, explicitó que “ante esta situación, nos encontramos trabajando con las otras áreas municipales involucradas, para establecer un plan de regularización de estos espacios, que para esta gestión son actores importantes en el desarrollo de la actividad cultural de la ciudad”.

Aclaró sin embargo que “muchas veces los tiempos administrativos estatales no siempre coinciden con los tiempos de las distintas problemáticas, pero queremos transmitir que estamos trabajando con muchísimo empeño para encontrar una solución a estos nuevos desafíos que nos plantea la gestión pública cultural; donde sector público y sector privado tenemos que apostar al diálogo con respeto y a la construcción conjunta, entendiendo que nos une un objetivo común: fomentar y desarrollar la cultura sin desatender la seguridad del público y los artistas”.