Asaltantes se llevaron 55.000 pesos del frigorífico Arroyo

 Los delincuentes que asaltado el domingo el frigorífico Arroyo entraron al predio donde funciona la planta de faena y oficinas administrativas tras cortar un tramo del alambre del cerco perimetral. Avanzaron cautelosamente amparados por la oscuridad de una noche cerrada. En ese sector de la planta casi no hay iluminación. El sereno no advirtió desde la garita ubicada en el acceso principal los movimientos de los asaltantes armados y encapuchados, que lo redujeron y golpearon. Luego, agredieron a un repartidor al que ataron junto con sus dos hijos. Después, huyeron del lugar con unos 55.000 pesos de recaudación.
Fue un grupo de entre seis y ocho sujetos armados y encapuchados que sorprendió al sereno, de 60 años.
El comisario Elio Tapia informó que los asaltantes golpearon al empleado para que les abriera las oficinas que hay en el predio. Reclamaban que les indicara donde estaba la caja fuerte.
El sereno abrió tres oficinas y desactivó la alarma. Uno de los asaltantes quedó custodiando al empleado en una de las oficinas, mientras el resto del grupo revisaba todo el lugar en busca de la caja fuerte.
En una oficina hallaron una caja metálica empotrada en una pared. Pudieron abrirla y encontraron unos 5.000 pesos, indicó Tapia.
Veinte minutos después, arribó a la planta un repartidor de la empresa procedente de San Martín de los Andes y Villa La Angostura. El hombre ingresó en el camión al lugar y los asaltantes lo encañonaron. Estaba acompañado de sus dos hijos de 12 y 14 años.
El comisario dijo que el repartidor intentó resistirse, pero lo golpearon y obligaron a entregar el bolsín que transportaba en el camión donde tenía unos 50.000 pesos de recaudación y algunos cheques.
Los asaltantes ataron al repartidor y sus hijos con precintos. Luego, los dejaron en la oficina donde estaba el sereno.
Los desconocidos advirtieron que había otra oficina a pocos metros. Fueron hasta ese inmueble y constataron que en el interior estaba la caja fuerte. Con una maza y una barreta rompieron la puerta y cuando irrumpieron se activó la alarma. Los sujetos destruyeron el tablero de la alarma, pero no pudieron romper la sirena porque estaba a varios metros de altura.
Ante la imposibilidad de seguir adelante con el robo de la caja fuerte, optaron por escapar del lugar en la camioneta del repartidor, que estaba estacionada en el predio con la llave puesta. Pero no pudieron hacerla arrancar. Regresaron a la oficina donde estaba encerrado el empleado, quien les indicó cómo ponerla en marcha. Luego, escaparon del predio.
Tapia dijo que a las 3.05 fueron alertados desde el centro de monitoreo de la empresa de seguridad que se había activado la alarma en la planta de faena de la empresa Frigorífico Arroyo. Cuando los policías de la comisaría de Dina Huapi arribaron al lugar, el sereno y el repartidor con sus hijos ya se habían liberado de las ataduras.
Explicó que el chico de 12 años se liberó del precinto y auxilió a su padre, quien luego desató a su otro hijo y al sereno.
Los policías recorrieron la zona y hallaron la camioneta abandonada en un camino vecinal, en cercanías de la Ruta Nacional 40. Todo indica que la banda se subió a otro automotor para huir. No hay ningún detenido ni sospechosos por el robo.