El dinamismo se impuso al bajón general

El dinamismo se impuso al bajón general

Por Adrián Moyano
amoyano@elcordillerano.com.ar

Durante el año que se va, Carolina Biscayart arribó a “El inevitable trazo de las horas” pero lo presentará en marzo porque recién salió de imprenta. Anahí Rayen Mariluan cantó en Alemania, Perú y Chile, además de comenzar a trabajar en un documental. Graciela Cros “sacó” el tremendo “Pampa de Huenuleo” y Paula Tabachnik logró con Baco Compañía Teatral, el Primer Premio en la Fiesta Provincial del Teatro. Cuatro ejemplos de dinamismo artístico a pesar del bajón generalizado.

EC: - ¿Qué logros artísticos conseguiste en el año que se va?

Carolina Biscayart: si bien la cosa así planteada me resulta grandilocuente, creo que pasaron e hice cosas que me resultan relevantes: la literatura fue herramienta y refugio… Escribí todo el año en pulsos, como me caracteriza. Acaba de llegar a mis manos la edición de un libro de poemas Biscayart en la Feria del Libro de Buenos Airesque empecé a escribir en diciembre del año pasado y terminé de trabajarlo en junio: “El inevitable trazo de las horas” (Ediciones en Danza), que recién será presentado en marzo de 2018. Además, estoy escribiendo una novela de modo no lineal. No sé exactamente en qué formato terminará, pero la respeto y la dejo andar a su forma y a su tiempo. Tengo un libro de poemas terminado que pasará a ser corregido y vuelto a corregir, no sé el tiempo que eso llevará porque está muy sujeto a la realidad que vivimos. También fui invitada a la Feria del Libro de Buenos Aires para hablar en una mesa sobre la poesía de hoy. Esta invitación de La Fundación El Libro me llenó de satisfacción, fue una gran sorpresa y un gran reconocimiento. La experiencia fue fantástica, conocí a muchos poetas y conversé de poesía con ellos, además de compartir. Nada mejor que compartir con poetas… Además, coordiné un taller literario que para mí es una fuente de mucha satisfacción. Si bien el grupo tiene recambios, siempre es muy presente, comprometido y escriben todos cada semana. Este año, dos personas del taller recibieron premios del FER y de la EMB respectivamente, con textos escritos durante estos dos últimos años de taller, donde los trabajaron y les dieron forma de libro. Yo, muy orgullosa de esas cosas.

Anahí Rayen Mariluan: pude presentar en muchos marcos mi segundo disco (“Amulepe taiñ purrün – Que siga nuestro baile”. Club del Disco 2016) y llegar con mi música a Alemania, Chile y Perú. Pude desarrollar la composición temática con apoyo de la Beca del Fondo Nacional de las Artes con “Mankewenüy”, y animarme a pensar el desarrollo en un documental que cuente nuestras sonoridades, nuestra historia, nuestros ancestros. También, pude homenajear a Violeta Parra durante un mes, en distintos puntos de la ciudad.

Graciela Cros: 2017 tuvo un hito trascendente en mi poética, la edición de "Pampa de Huenuleo" que, a la luz de los acontecimientos gravísimos que estamos viviendo, parecería cumplir con ese dictum de la poesía: su facultad de ver antes… Es un texto fuerte que me llevó mucho tiempo cerrar. De alguna manera, ratificado cada día por lo que vivimos, el texto crece, se agiganta y siento que me interpela. Fue editado por Ediciones en Danza y sumó a la poética del libro la foto de tapa del reportero gráfico, querido amigo y reconocido artista de la imagen “Chino” Leiva. En 2017, también participé en distintos eventos relacionados con la poesía y la literatura, como la presentación de "Pampa de Huenuleo" en la Escuela La Llave; el FILBA, aquí en Bariloche; la presentación de "Pampa de Huenuleo" en la Feria del Libro de Buenos Aires; la Fiesta de la Palabra en Bariloche y el Festival de Poesía en San Martín de los Andes, con motivo de los 100 años de la Biblioteca Popular “9 de Julio”. Además de dictar una clínica de poesía, fui jurado del concurso de cuentos. Además, fui jurado del concurso de poesía convocado por la Fiesta de la Palabra junto a Juan Carlos Moisés y Cecilia Fresco.

Paula Tabachnik: desde 2010, cada año desde que estoy en Bariloche, se me presentan nuevos desafíos en términos artísticos. El arte es lo que atraviesa y moviliza mi vida. A través del arte puedo explorar en ciertos aspectos del comportamiento humano y, de algún modo, indagar en el pensamiento, meterme con ese mundo del consciente y el inconsciente, tal vez, con la inquietud de comprendernos y conocernos un poco más. Esa exploración y esas inquietudes son las que busqué y creo que logré investigar y poner en escena a través del montaje de “Hamlet. Herencia de la carne”. Contar con una compañía de teatro que se permite atravesar un proceso creativo, con toda la crisis que eso implica, es un logro conjunto. Porque justamente, si hablamos de logros, el trabajo en equipo es fundamental. Así es que, luego de lograr el primer premio en la Fiesta Provincial del Teatro, participaremos en representación de la provincia de Río Negro, en la Fiesta Nacional de Teatro 2018. También tuve un gran logro artístico dentro del marco de la Licenciatura y el Profesorado de Teatro de la UNRN. En la asignatura Actuación III, a través de un proceso didáctico, pudimos crear una obra de teatro, “Freak Show”, del tucumano Martín Giner. Viajamos con el grupo de estudiantes al Encuentro Nacional de Estudiantes de Teatro (ENET), así que tuve la oportunidad de dictar un seminario en técnica Viewpoints y algo del Método actoral Suzuki, para unos treinta estudiantes de siete universidades nacionales. Allí, en La Rioja, hicimos una función para los 150 participantes -docentes y estudiantes- de “Freak Show”. Es, para mí, un gusto doble que el grupo conformado por Cecilia Planas, Francisco Vargas y Daniel Calfinao desee continuar con funciones durante 2018. Otro logro que debo mencionar es la presentación de mi tesis de Maestría con Mención en Dirección. Comencé con los estudios de postgrado en 2013 en Tandil, viajando hasta siete veces en un mismo año a cursar. Con mucha perseverancia y paciencia por parte de mi pareja, el músico Cristian Busamia, y de mis hijos Ioshua y Mijael, hace pocos días, logré presentar finalmente la tesis. Casi me olvido de otra experiencia muy interesante que tuve, que logró concretarse en septiembre de 2017, y fue la oportunidad de dar una conferencia sobre mi labor como docente y directora en la Facultad de Bellas Artes de la UNLV, en Las Vegas (Estados Unidos).

EC: - ¿En qué estás trabajando o qué te quedó pendiente de cara a 2018?

Carolina Biscayart: presentaré “El trazo inevitable de las horas” aquí y en distintos lugares que se presenten. Seguiré trabajado en la escritura de la novela. Pretendo terminar el libro de poemas que tuvo gesta en todos los hechos lamentables que vivimos en la región: la represión al pueblo mapuche; el manto de insensibilidad, deshumanización y mentira con el que se manejaron las cosas y el terrible costo humano que llevó dos vidas este año. Y que lleva miles de vidas anteriores… Esa trama sigue porque se construye a diario. También seguiré dictando talleres literarios o llevando la escritura creativa a las escuelas, y participando y apoyando las propuestas literarias de mi entorno. Aún no sé en cuántas cosas me terminaré arrimando pero seguro en muchas. Soy vital en ese sentido.

Mariluan en el Parque de la Exposición, Lima Foto Bruno OsorioAnahí Rayen Mariluan: trabajo en ese tercer disco: “Mankewenüy (amiga del cóndor)” y en uno paralelo sobre cantos de cuna. El documental que derive del primero está en proceso de guionado y nos mantiene felices una concreción de ese material. Por otro lado, sigo investigando en las fuentes sonoras de principios de siglo pasado para que vuelvan a sonar las voces mapuche que no por casualidad, tenían por reclamo lo mismo que hoy seguimos exigiendo. Para eso estuve recabando datos en archivos de Berlín y Sankt Augustin (Alemania) en noviembre último.

Graciela Cros: para el 2018, tengo dos prólogos que escribir. También, en 2017, escribí uno para una poeta argentina radicada en México. Eso lleva mucha lectura, es un trabajo intenso y requiere gran dedicación. En cuanto a mi propia escritura, tengo una prosa entre manos, pero no quiero decir nada más. Espero sorprenderme a mí misma en primer lugar.

Paula Tabachnik: Con Lihué Vizcaíno, con quien iniciamos Baco, estamos buscando sumergirnos en el entrenamiento actoral desde nuevos enfoques. Estamos con la idea de desarrollar nuevos ejercicios para el entrenamiento del intérprete. Es un campo en el cual venimos indagando, pero aún tenemos pendiente concretar. A su vez, ella está trabajando en el nuevo montaje que va a dirigir y yo estoy con investigaciones para la creación del personaje (histórico) que me tocará encarnar. También llevaremos adelante, en co-dirección con Rodolfo Fernández Lisi (quien es nuestra tercera pata en la dirección de la compañía), una búsqueda escénica que estará enfocada en crear micro-montajes con temática intercultural. También tengo pendiente invitaciones para el dictado de seminarios en algunos puntos dentro y fuera del país. Ahí estamos encarando esos pendientes.

EC: - ¿Cómo te parece que evolucionó -o no- el quehacer cultural y artístico en Bariloche?

Carolina Biscayart: creo que Bariloche evolucionó en el quehacer cultural. El funcionamiento de la EMB y de Eliana (Navarro) a la cabeza con su tarea de generar concursos, editar, de realizar eventos de socialización y de integración e inclusión, ha tenido un papel fundamental. Que el FER se haya reactivado para el lado del que escribe, de “mover la palabra”, creo trajo aire nuevo e incentivo en la literatura. Salvando las distancias o diferencias que yo tenga en el modo, creo que lo que pasó tiene un saldo más que positivo. También hay que nombrar eventos que se desarrollaron en Bariloche: una nueva Fiesta de la Palabra y todas sus actividades, el FILBA… Saliéndome de la literatura, he ido a varias muestras de artes plásticas. Tengo un mayor contacto con eso porque mi madre pinta y tengo amigas que se desarrollan en esa área. También fui a escuchar eventos musicales muy bellos que se nota que son el producto final de mucho trabajo. Creo que, respecto a años anteriores, la llama de los eventos culturales está más vigorosa por quienes la gestan y la sostienen.

Anahí Rayen Mariluan: la escena local siempre es de una actividad intensa en crecimiento. Lo que no veo crecer es la posibilidad de dar a los artistas condiciones edilicias para tanta actividad. Considero que Bariloche desestima la posibilidad de ver crecer de la mano de sus artistas, sus propuestas. Es el caso del teatro público al lado del Elefante Blanco es definitivamente indignante. El municipio dejó caer una posibilidad magnifica.

Graciela Cros: el cierre del espacio cultural “La Casita Azul” es un ejemplo claro de lo que veo que ocurre. En Bariloche, hay extraordinarios artistas, productores culturales, creativos, pero cada movida es un gesto individual con poco o cero apoyo de parte del Estado. Menos mal que hay Graciela Cros durante una presentaciónmuchos jóvenes, y los que, como yo, ya llevamos mucho camino transitado y sentimos que la energía se está acabando, nos apoyamos en ellos que van adelante. Como decía el gran Roberto Arlt, por “prepotencia de trabajo”. ¡Y qué bueno es ser testigo de eso! En el campo de la literatura, la EMB y la Fiesta de la Palabra siguen siendo logros colectivos estupendos y, ojalá, continúen.

Paula Tabachnik: desde 2010 hasta la fecha, hay un gran crecimiento en el terreno del arte teatral. Y estoy convencida de que la Universidad Nacional de Río Negro es protagonista en esta evolución. La UNRN tiene dos carreras relacionadas al teatro: el Profesorado y la Licenciatura. Cada una de ellas se enfoca en distintos aspectos que hacen al mundo del teatro. Porque la actividad teatral no es sólo la experiencia escénico-estética. El teatro en las escuelas, por ejemplo, acompaña los procesos de comunicación. También debo mencionar que el Instituto Nacional de Teatro tiene un rol protagónico en nuestra ciudad. Desde las actividades llamadas "Formación de espectadores" que es justamente la oportunidad de que estudiantes de Primaria y Secundaria vean teatro y desarrollen -a través de una serie de actividades didácticas- una mirada más profunda y, tal vez, más completa sobre la experiencia escénica. Y si hablamos de Bariloche y del INT, debo decir que estamos en una gran deuda con nosotros mismos. No sólo con los que nos dedicamos a la actividad teatral, sino con toda la población barilochense. Me refiero a contar con un teatro independiente. He estado en muchas ciudades de Argentina y doy fe de que, incluso en ciudades de diez mil habitantes, hay un lugar llamado teatro. Un teatro municipal o independiente. Es llamativo, que en una ciudad como Bariloche, aun no contemos con un teatro así.

EC: - ¿Qué influencia te parece que tiene la situación nacional en el ámbito cultural y artístico local?

Carolina Biscayart: influye en todo irremediablemente, porque estamos inmersos. No puedo generalizar en “el artista” y el efecto de un gobierno, menos a sabiendas de que es un gobierno legitimado en las urnas. Puedo hablar desde mí y creo que represento a muchos otros: hablando desde mí, conté recién que la realidad inmediata generó un libro y ese libro es mi sosiego. También una literatura conmovida y, por eso, cierta y, por eso, para mí, necesaria. Vi en cada espectáculo literario o no, manifestaciones de los artistas sobre estos hechos, repudiando la violencia y la insensibilidad, al menos, se manifestaron desde ese lugar con su voz, con una foto o incluyendo propiamente en sus repertorios el tema de alguna manera. Por supuesto, elijo ir a determinados lugares, a otros no los elijo y no puedo asistir a todos los que elegiría. Pero veo eso: hay gente que se mueve.

Anahí Rayen Mariluan: la lamentable coyuntura política nacional, provocadora y racista, puso a mi pueblo en una caracterización violenta, entre otras numerosas debacles sociales. Pude ver una cada vez mayor cantidad de gente que apoya las causas pendientes del Estado con el pueblo mapuche e intuyo que hay una gran parte del país que ya no es ingenua, aunque hay que seguir batallando contra la construcción de estereotipos de los grandes medios. Estos, en definitiva, son el bunker de los racistas. Esa provocación va a ser resistida por los artistas siempre, de manera que se vienen grandes germinadores de arte contestatario.

Gaciela Cros: somos animales sociales y el saldo a favor en lo personal está opacado por la situación gravísima que vivimos en el país. Lo que ocurre genera desaliento, tristeza, impotencia, indignación… ¡Espanto! Nunca creí, como muchos otros compatriotas, que iba a ver nuevamente imágenes tremendas, dolorosas… No imaginaba que el gobierno iba a ir tan lejos como lo está haciendo, marginando a los más vulnerables, pero el arte se hace contra algo, ya se ha dicho… Por eso, creo que los artistas seguirán produciendo su obra, aunque las circunstancias sean hostiles.

Paula Tabachnik: qué difícil que es hablar de la situación nacional… Yo pienso, y es un pensamiento tal vez utópico, que si todos los que hacemos a nuestro hermoso país, tuviéramos un grado mayor de conciencia de la realidad, fuéramos un poco más amables con el prójimo, atendiéramos nuestro entorno en lugar de perder tiempo y hablar sobre lo que desconocemos... Si pudieron observar que el neoliberalismo arrasa con todo y que seguimos siendo un país del Tercer Mundo, nos guste o no... Que la Argentina se conforma de diversas nacionalidades, religiones, tendencias de todo tipo y que eso nos distingue pero que también, y justamente también, aniquilamos nuestra propia historia. Si fuéramos más conscientes de que somos quienes hacemos a nuestra realidad: política, social, económica, educativa, que cada acción individual impacta al colectivo, tal vez, con perseverancia y humildad, podríamos ser mejores personas en un país libre. Porque la Argentina es un país libre. Libre de pensamiento. ¿O sólo será una apariencia para una persona de tez blanca como me tocó nacer?
 

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