El Hogar Emaus cumplió 2 años en su propia casa

El Hogar Emaus cumplió 2 años en su propia casa

El pasado 29-julio el Hogar Emaús cumplió dos años en su propia casa. Funciona desde hace 6 años gracias a un grupo de voluntarios impresionante. Tiene buen puesto el nombre: no es un refugio, no es un alojamiento, no es una oficina de asistencia, es un HOGAR. Construido por toda una comunidad, ladrillo a ladrillo, lo hicimos juntos y ahí está, albergando hombres en situación de calle, personas de bajos recursos que pasan por la ciudad haciendo trámites, familiares – siempre masculinos – de internados que no pueden pagar un hospedaje, todos son bienvenidos.

“Quería compartir con la familia del Hogar Emaús una experiencia lindísima que me tocó vivir” nos empieza contando el Polaco, querido y perseverante voluntario del Hogar Emaus “estaba charlando con uno de los muchachos – Lucho – y me contó que finalmente está recibiendo su tan deseada jubilación”.

El Polaco luego de felicitarlo le preguntó a Lucho si iba a alquilarse algo para estar más cómodo, o si iría hasta Chile a visitar a su familia o qué decisión iba a tomar ahora que con la jubilación gozaría de algo más de libertad, después de pasar años en la calle y siendo asistido en el Hogar… Pero Lucho, con su buena y limpia ropa bien elegida del ropero comunitario, su bastón y un peinado muy esmerado para el festejo del aniversario del Hogar, le respondió con ojos angelicales:- Yo me quiero quedar acá, este es mi lugar en el mundo, me encanta ver lo que hacen Uds todos los días, acá descubrí lo que no pude descubrir en otro lado, me siento querido porque veo que se ocupan de mi con amor ¿dónde voy a estar mejor? Si este es MI hogar”.

No se puede ser testigo de semejante declaración de verdad, simpleza y profundidad sin replantearnos todas las prioridades. Te invito a mirar a Lucho a los ojos. Podemos observar en él la vida dura, las mejillas maltratadas por heladas bajo cero, los ojos cansados y los hombros bajos… pero también podemos observar un brillo especial en su mirada, una sonrisa emocionada bajo su bigote recortado, su peinado esmerado, la camisa limpia y prolijamente cerrada… el abrazo de su amigo. Después de esta foto le dije que estaba más peinado que el Polaco y soltó una sonrisa cómplice y aniñada.

El Hogar Emaus

El Hogar Emaus desde hace 6 años recibe a hombres de la calle para ofrecerle una comida y colchones en el piso al principio, hoy festejamos el 2do aniversario del Hogar propio, un digno establecimiento con mas de 40 camas, batería de baños y cocina, espacio común y 80 voluntarios atentos. En la calle Goedecke 1170 de San Carlos de Bariloche. Ahora con espacio propio los voluntarios del Hogar no se dedican solo a la comida y a tener las camas limpias, asisten en temas de salud, documentación, búsqueda de familiares, recuperación de derechos, inserción, actividades grupales, huerta, arte, recreación.

El Padre Pepe y un grupo incansable de voluntarios han hecho de todo para sostener esta tarea, en espacios prestados, tirando colchones en el piso, juntando comida a veces a último momento y sufriendo cuando había que cerrar el espacio algunos meses… En el 2010 se unieron varios esfuerzos para iniciar una gran campaña comunitaria, gracias al aporte de TODA la comunidad, en dos años el Hogar Emaus estuvo concluido.

Podes colaborar:

Sistema SICEI, a través de la facturación de la luz (para residentes de San Carlos de Bariloche) podes cooperar con el monto que desees, mencionando que es para el Nro Entidad 24693, Nro Convenio 431 (Hogar Emaus)

Podés sumarte como voluntario, o preguntar cómo colaborar con comida, ropa, actividades etc al Facebook: https://www.facebook.com/emaus.bariloche

Uno de los “muchachos” – como se le llama cariñosamente a los hombres de la calle – dice que dentro del hogar solo se encuentra paz y armonía, cuando se cierran las puertas adentro está el compañerismo, la lealtad, la determinación de los voluntarios…

Este hogar recibe gente los 365 días del año, es decir que los voluntarios en horarios rotativos, están ahí los 365 días del año. ¿Podemos dimensionar lo que eso significa en esfuerzo, organización y convicciones? Felicitaciones… y gracias!

¿Qué es realmente importante en nuestras vidas?

Jamás vi a alguien acarrear a su muerte los objetos acumulados durante su vida, pero sí he visto morir a personas hermosas con una sonrisa en los labios. Sin embargo en el día a día veo más gente preocupada por acumular que por sonreír. ¿Qué es lo más importante en nuestro tránsito por la vida? ¿Qué pasa si nos ocupamos un poco más por dar y recibir amor? A veces observamos tanto abandono anestesiados, pasamos al lado meneando la cabeza, murmurando “cómo nadie se ocupa de este chico”, “qué hacen nuestros funcionarios”, “qué horror, por qué tengo que ver esto”… No hablo solo de la pobreza económica, hablo de todo tipo de pobreza. Sin embargo la respuesta es tan simple. Un día – una vez – podríamos intentar dejar libre el corazón y permitir que aparezca la intención de preguntar, de mirar a los ojos, de abrazar, de buscar alguna respuesta más allá de la queja o la indiferencia. Ese día no vamos a estar solos, ni seremos tratados como locos, ese día vamos a descubrir a miles, millones de personas que antes no habíamos visto y que cada día intentan algo diferente… si esto que digo no fuera verdad el hogar Emaus no sería eso que dice Lucho: “este es mi lugar en el mundo”. Ese lugar existe porque ya hay gente haciendo algo diferente. Es posible.

Es posible.

Por Vanesa Vicente

Mas fotos en http://www.periodicodelbiencomun.com/acciones-propuestas/el-hogar-emaus-hace-2-anos-que-tiene-casa-bariloche/

Periódico del Bien Común