Emoción y “orgullo” en Invap por el Arsat 1

 El lanzamiento exitoso del primer satélite de comunicaciones del país, tronó fuerte en la sede de Invap en Bariloche, donde se fabricó. Cientos de empleados de la firma, e invitados especiales, colmaron el comedor del edificio principal.
Con plena atención, presenciaron a través de las pantallas LED, el histórico acontecimiento, que posiciona a la Argentina entre los ocho países en desarrollar ese tipo de tecnología satelital.
Paralelamente, los televisores transmitían la señal de la Televisión Pública y la de la empresa a cargo del lanzamiento desde Guayana Francesa, Arianne Space.
Con altas expectativas y clima festivo, los empleados de Invap palpitaron el despegue desde Guayana Francesa. Emoción, alegría y “orgullo” fueron las expresiones colectivas de la jornada.
“Siento mucha emoción por la parte argentina. Somos una Pyme de todo eso. Mucha emoción y orgullo por Argentina”, expresó conmovida y en diálogo con ANB, Lorena, una de las empleadas de Invap que se desempeña en el área de Sistemas. Otros, manifestaron ese “orgullo” vistiendo camisetas de la selección argentina, en un clima cuasi 'mundialista'.
Algunos de los empleados que trabajaron en el satélite explicaron paso a paso el procedimiento del lanzamiento que fue seguido con atención por la concurrencia, que incluso interactuaba con lo transmitido desde Buenos Aires, donde también se festejó el despegue. Además aplaudían al ver a alguno de los 5 directivos o de los 20 empleados de Invap que viajaron hasta Guayana Francesa para pormenorizar el lanzamiento.
“Anoche les agarraron todos los miedos de que algo salga mal, como si fuera un examen”, expresó una de las empleadas, en alusión a la comitiva que viajó para ultimar el lanzamiento del Arsat 1.
Se vivieron algunos momentos de tensión, cuando se informó sobre inconvenientes meteorológicos primero y del otro “pasajero” del cohete Arianne 5 –Intelsat 30 de Direct TV-, cuyos sistemas debieron ser “reseteados” a último momento, y comenzaron a ceder con la progresión de las barras verdes previa al tiempo descuento.
Los nervios se disiparon cuando, a las 18,30 horas, comenzó el conteo regresivo que dio inicio a una ovación en el despegue. Recién veinte minutos después, cuando el cohete fue soltando partes y ubicó al ARSAT-1 en la órbita de transferencia, el subgerente general de Invap Vicente Campeni se permitió expresar: “El lanzamiento fue exitoso”.
Y explicó que “ahora viene un lapso de entre 10 y 15 días en el que el satélite va pasando por todas las estaciones, es operado desde la estación de ARSAT en Benavídez y se va configurando en su órbita definitiva”, precisó el científico, en diálogo con la prensa local.
Puntualizó además, que Arsat 1 “estará operando normalmente” a fines de noviembre o principio de diciembre”.
El satélite fue diseñado, construido y testeado en la sede de Invap en Bariloche, proceso que demandó años. Se trata del primer satélite geoestacionario construido en la Argentina. El proyecto demandó 270 millones de dólares y permitió que Argentina no perdiera la posición orbital 81, codiciada porque enfoca desde Estados Unidos hasta las Malvinas, y con el Reino Unido en espera en la Unión Internacional de Telecomunicaciones.
Entre los invitados al evento en la sede de Invap en Bariloche, se destacó la presencia de un nutrido grupo de estudiantes del Instituto Balseiro. También asistieron el presidente del Concejo Municipal, Ramón Chiocconi, en representación de la comuna, y el titular de la Cooperativa de Electricidad Bariloche (CEB), Rodolfo Rodrigo, entre otros.