Prevención de hantavirus: cómo recolectar hongos cuidándose

 Se contagia por inhalación de partículas de virus presentes en la orina, heces y saliva de roedores infectados, lo cual ocurre al respirar aire contaminado, o por el contacto directo con estos animales o sus excrementos.

Recomendaciones:

Una de las medidas más efectivas es el uso de guantes de latex.

Usar calzado cerrado.

Finalizadas las tareas de recolección lavarse las manos.

No recolecte hongos de aquellos lugares donde evidencie presencia de roedores (nidos, semillas de mosquetas amontonadas, frutos comidos, etc).

En el momento de cortar el hongo, hágalo dándole la espalda al viento de manera tal que si al remover el suelo (tratar de no hacerlo) si se levanta polvillo al tener el viento en la espalda ese polvillo lo disipa hacia adelante y no lo aspiramos.

Busque los momentos de mayor humedad ambiental para esta actividad.

No huela los hongos.

Aunque no es muy cómodo durante la recolección, lo ideal es utilizar barbijo N°95 ya que es muy efectivo. Si decide hacerlo, elija colocárselo solo en los momentos de cortar el hongo.

Cuidar el recurso

Hay manera de cortar los hongos para garantizar que el recurso siga presente con el correr de los años.

Llevar un canasto o malla de cebolla para que las esporas que se desprenden de los hongos caigan a la tierra y puedan crecer nuevos hongos.

Evitar bolsas plásticas, pues los hongos necesitan respirar, además las bolsas condensan la humedad acelerando la putrefacción.

Recoger solo hongos desarrollados/adultos que podrán desprender sus esporas una vez cortadas, respetando los especímenes jóvenes.

Cortar cuidadosamente el hongo a ras de suelo con un cuchillo para no dañar su micelio (la "raíz" o parte oculta) ya que así podrá seguir produciendo nuevos hongos.

Si no se respetan estas reglas, cada año veremos como disminuye la cantidad de setas silvestres, es nuestra responsabilidad ser recolectores sin depredar.