Una fiesta distinta

 Aunque sin los eventos tradicionales que durante años le dieron vida, Bariloche celebra la 50 edición de la Fiesta Nacional de la Nieve. Con un aforo cuidado, vecinos y turistas pueden cruzar las arcadas del Centro Cívico y vivir una experiencia diferente, recorriendo un laberinto con distintas estaciones relacionadas con la ciudad y con la nieve y para los más chicos una pista de patinaje sobre hielo. Carritos con comidas típicas y un escenario con artistas locales completan la escena, que puede disfrutarse por una hora y media.

Mientras los grandes disfrutan de una comida regional o una cerveza, entre tantas opciones, los chicos de hasta 12 años pueden patinar sobre hielo bajo una nevada improvisada y disfrutar de esta experiencia, aunque sea por unos minutos. Hay asistentes para ayudar a los menos experimentados o levantar a quienes tropiezan dándoles ánimo para no bajar los brazos y seguir pasando una tarde diferente, mientras otros disfrutan patinando por el centro de la pista y los menos atrevidos la recorren agarrados de las barandas. Con cualquier opción la única consigna es ponerle onda y disfrutar de la Fiesta de la Nieve en una jornada realmente espectacular.

"Es una alegría, con todos los cuidados, las restricciones, el clima, que está hermoso pero por ahí no es propio de estos tiempos", expresó la gobernadora, Arabela Carreras, presente en la tarde de este sábado. Resaltó el acompañamiento y el esfuerzo para llevarla a cabo, además del trabajo conjunto entre el sector privado y el público. "Es una verdadera fiesta", expresó y felicitó a quienes participaron de la organización.

Con el "corazón lleno de alegría" el intendente Gustavo Gennuso resaltó que este tipo de eventos son pasos para decir "que estamos vivos, bien, que Bariloche puede recibir turistas, que sus propios vecinos pueden disfrutar una fiesta distinta, pero que nos damos maña para disfrutar a nuestros artistas, que tengan un lugar donde mostrarse, compartir todo eso que han tenido que tener escondido tanto tiempo, estamos muy contentos".

Resaltó que esta fiesta tiene una simbología muy fuerte, al cumplirse 50 años, y resaltó que "debe ser una de las pocas fiestas que se ha hecho en el país, como la del Chocolate o Bariloche a la Carta, habla muy bien de lo que podemos lograr cuando vamos para adelante".

La gobernadora resaltó la cantidad de turistas que visitan la ciudad, tal como se aprecia en los restaurantes o comercios y no dudó en afirmar que "es una alegría". No obstante reconoció que se nota la ausencia del turismo internacional y expresó el deseo de que puedan abrirse las fronteras. Aseguró que en eso están trabajando.

Por su parte, Gennuso resaltó que "turismo significa que muchos pueden llevar el pan a la casa con un trabajo digno" y recordó que han ido localidad por localidad "a buscar a los turistas, para que puedan venir, buscando soluciones para nuestra gente que necesita trabajar y para eso necesitamos que venga turismo".