Campings: el turismo de las mil estrellas y mil opciones

Campings: el turismo de las mil estrellas y mil opciones

La postal se repite en varios rincones de la ciudad. Innumerables filas de carpas con un perfil de ocupantes completamente diverso. Familias que llegan en auto, grupos de jóvenes y cientos de scouts, como hacía años no se veía.

El ahorro monetario que genera acampar –un promedio de 250 pesos por día– y el contacto con la naturaleza conforman un combo que seduce a los turistas.

La ocupación durante la temporada estival resultaba una incógnita ya que a diferencia de años atrás los visitantes ya no suelen reservar sino que caen de imprevisto. Pero después de los primeros días de enero, con el aumento de la temperatura, la llegada masiva de acampantes terminó por develar el misterio. Hoy la mayoría de los campings en Bariloche están completos.

“Fue de golpe. Cambió el clima y explotamos. Hoy tenemos unas 230 personas acampando. Muchísimos argentinos pero también chilenos que llegan en motorhome. Nos visitan de Neuquén, Comodoro Rivadavia, Córdoba, Buenos Aires. Algunos reservan pero muchos simplemente llegan y tantean si hay lugar”, resaltó Tomás Sallis, concesionario del camping Cirse en el kilómetro 14,5 de la avenida Bustillo.

Bariloche cuenta con más de 25 campings dentro del ejido municipal y en jurisdicción del parque Nahuel Huapi. El más cercano al centro es el camping Selva Negra en el kilómetro 2,9 con ingreso por avenida Bustillo. Un poco más hacia el oeste, El Yeti ofrece a los acampantes piscina y jacuzzi. Petunia, en el kilómetro 13,5, es uno de los más visitados con una playa de arena de 200 metros y un predio boscoso de 3 hectáreas. El resto están distribuidos en el corazón de Colonia Suiza, el lago Gutiérrez, Mascardi y Guillelmo.

“Decidimos acampar porque nos resulta más económico ya que somos 18 (vinimos en 3 autos). Nos conviene mucho más que alquilar una cabaña. Somos de la costa y todo lo que es bosque nos encanta. La idea es bajar un cambio”, sintetizó Patricia Molina, de Trelew, mientras el resto de los visitantes terminaba de armar las carpas.

Hoy, el promedio de estadía varía entre una semana y 10 días pero la mayoría de los acampantes pernoctan un promedio de 2 o 3 noches ya que recorren la región o bien usan al camping como base para hacer trekking hasta los refugios de montaña.

“Los últimos 10 años cambió el perfil de los acampantes. Antes, venían y se instalaban acá; ahora, se van temprano y vuelven a última hora. Más aun aquí en Colonia Suiza que tienen los refugios de montaña a mano”, explicó Julio “Maguila” Vázquez, del camping Huenei Ruca a 25 kilómetro de Bariloche.

Gustavo López, de zona norte en provincia de Buenos Aires, llegó a Bariloche, junto a 5 amigos del secundario. “Tenemos en mente hacer montaña. Acampar acá nos permite estar más cerca, dejar la mochila para no subir tan cargados y por supuesto, relajarnos cuando bajamos arruinados. Podríamos haber ido a un hostel pero queríamos algo fuera de lo cotidiano. Esto es más libre y tenemos el lago a dos pasos”, señaló mientras dos amigos tocaban la guitarra y otro distribuye los mates.

“Acampar nos permite cambiar de aire, cocinar y ver el lago y las montañas de fondo. ¿Cuánto nos quedamos? Lo que pinte”.
Ariel Goncalves,
de Capital Federal.

Múltiples opciones y precios para comparar
• Selva Negra en el kilómetro 2,9 de Bustillo: $ 290 pero baja si la estadía se prolonga.
• Cirse en el km 14,5 de Bustillo: $ 200 (baja para grupos o estadías prolongadas).
• Petunia en el km 13,5 de Bustillo: $ 250 (menores 125). Auto y motorhome pagan extra.
• Ser en Colonia Suiza: $ 190 (no cobran vehículo).
• Huenei Ruca en Colonia Suiza: $ 200 (250 con desayuno).
• Los Coihues, lago Gutiérrez:
$ 250. Luego de dos noches sale $ 200. Motorhome paga extra.
• Los Baqueanos, lago Gutiérrez: $ 250 por persona (menores de 12 años, 125). No cobran por auto.
• La Querencia en lago Mascardi: $ 250 pesos (125 menores de 5 a 10 años).
• El Yeti, km 5,8 de Bustillo: $ 300 (descuentos por efectivo y estadía prolongada).

 

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